Sobre mi "Nido Vacío"

Mi obra gira alrededor del cuerpo. Lo tomo como algo dinámico, sorpresivo, a veces casi mágico. En esta oportunidad me interno en sus ciclos, en el tiempo que transcurre, que deja marcas, que hiere, que es implacable. Todo nos remite a lo mismo: al cuerpo y al tiempo que pasa…

Que nos pasa.

En este caso, fabrico un enorme nido formado por pelos canosos...

El echo de tener canas habla del transcurrir de los años y con ellos voy formando un inmenso nido donde albergo mis amores más profundos, mis afectos , mis pichones....

   Una cabeza y una maraña de pelos canosos. Blancos grisáceos, años transcurridos, rincones profundos de nuestro subconsciente, espacios íntimos que ahora forman parte de un pasado que se compone de imágenes que retumban y que se transfiguran  en pájaros en sus nidos.

   “Si se vuelve a la vieja casa como se vuelve al nido, es porque los recuerdos son sueños, porque la casa del pasado se ha convertido en una gran imagen, la gran imagen de las intimidades perdidas” afirma Gastón Bachelard en su Poética del Espacio.